mapa de ruta sudafrica y namibia

Sudafrica y Namibia – Parte I

Africa tiene algo especial que conquista al viajero según llega.

Solo hemos recorrido una pequeñísima parte del continente africano en este viaje, atravesando Sudáfrica y Namibia, pero han sido casi 10.000km increíbles. Sudáfrica es lo más occidentalizado del continente y esto queda claro una vez que pasas a Namibia, pero esta última tiene un encanto especial, las grandes mesetas, las rectas infinitas, sus desiertos y sus poblados perdidos tienen su propia personalidad.

bmw motorrad rentals
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Para no arriesgar decidimos decantarnos por el alquiler de unas BMW, queriamos una moto fiable y facil de conducir ya que ibamos a hacer muchos km de arena y ripio. Las elegidas unas ya conocidas, la R1200 para Alberto y Susi y la GS650 para mí y la verdad es que se portaron como campeonas (aunque el elefantito medio pinchó nada mas empezar). La empresa donde las alquilamos está en Johannesburgo, se llama Auto Alpina y pertenece a BMW Motorrad.

El viaje en total duró 17 días, de los cuales 10 fueron en moto ( 6.400km ) y cinco en coche ( 2.000km ) para visitar el parque Kruger y Swazilandia.
 

Empieza la Ruta

moto cargadaTras organizar toda la ropa, sacos y tiendas en las motos, nos despedimos de la gente de Auto Alpina hasta dentro de 10 días, que nos miraban como diciendo, pobres motos, mejor habrían alquilado dos elefantes. Así comenzamos nuestra andadura por Sudáfrica, saliendo de Johannesburgo pensando donde dormiríamos esa noche.
Al salir nos encontramos con la parte marginal de la ciudad, una sub-city de chabolas que tendría la misma extensión que el valle que ocupa Bilbao. Increíble, casas hechas con los materiales mas raros y poco fiables que os podáis imaginar, cualquier cosa era buena, madera, hojalata, cartón… y todo apilado sin orden ni concierto hasta encontrar el punto exacto en el que se tiene en pié. Eso si, el cableado de las chabolas es impresionante, no me extrañaría que alguna tuviera hasta televisión por cable. En Sudáfrica nos dimos cuenta de que, asi como la vivienda es algo secundario y cualquier cosa vale, el teléfono móvil y el coche (o cualquier cosa con ruedas que ande), es un artículo de casi primera necesidad. 

Sin verlo venir anocheció en nuestro primer día por África, la carretera empezó a ser intransitable con un montón de agujeros que con la falta de luz nos dieron mas de un susto importante asi que decidimos buscar nuestro primer B&B en un pueblo llamado Delareyville. Al ser invierno anochece muy rápido asi que hay que aprovechar al máximo las horas de luz ya que nunca sabes si la carretera va a ser fiable para conducir cuando cae el sol.

anochecer en africa
anochecer en africa


Parque Kalahari

Hoy hemos amanecido a las 6am, el pueblo tiene otro aspecto a la luz del día. 

autoescuela africana
autoescuela africana

Hemos hecho unos 400km pasando por Upington, donde nos ha pasado algo curioso. Al llegar alli paramos en un supermercado a comprar agua y comida y me acerqué a un grupo de personas que estaban haciendo una especie de inventario en una pickup para preguntar por una ferretería donde comprar un adaptador de corriente. El hombre se giró, miró las motos y al decirle que éramos de España mandó a un empleado a comprarnos el adaptador, nos metió en su negocio y nos explicó con pelos y señales que ver en Namibia y las carreteras a evitar, nos dio varios teléfonos para localizarle en caso de tener problemas y se despidió dejándonos con una cara de alucinados de narices. 



carretera africa
La inmensidad


245km después de ponernos en marcha llegamos al parque Kalahari. El último tramo fueron 180km de una recta infinita que casi puede con nosotros, rodeados de una estepa que se extendía mas allá de hasta donde me alcanzaba la vista, nuestro único entretenimiento era intentar ver algún avestruz, mono o cervatillo perdido que se acercaba a la carretera bien protegida por un continuo vallado que evitaba que salieran a la misma.

 

(Ya podeis perdonar por la calidad, no llevabamos una gran camara en esa epoca)

Y como si alguien nos hubiera escuchado desde arriba llegamos a la entrada al parque, 65km de grava y arena. La carretera estaba de obras asi que cada 2km te encontrabas con una chica agitando una banderola roja para avisarte de que debías desviarte por un camino de arena bastante poco pisado que para mi fue como el Dakar, en cuanto te despistabas la moto perdía el control y tenía que sudar la gota gorda para evitar besar el suelo. Hubo un par de sustos, pero ni comparar con los vaivenes que veía hacer al elefantito volador de mi hermano, ahí fue cuando me di cuenta de lo valiente (o lo colgada) que está mi cuñada, eso o tiene una confianza desmesurada en las habilidades de mi hermano (me decanto por la primera).

Esa noche dormimos en un bungalow en medio del Tweerivieren Camp y vimos con asombro el cielo de África, que superó con creces todas mis expectativas. Podíamos ver la cúpula terrestre perfectamente y millones de estrellas que brillaban formando esas constelaciones que es imposible ver en España sin la ayuda de un telescopio y que alli casi parece que puedes unir los puntos con la punta del dedo para formar la figura clara de capricornio, leo, etc. 

 
Continuará….
 

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